Orígenes de la saga


Dice la profecía...

Habrá una guerra entre los dioses del cielo, llamada Ragnarök (El destino de los dioses). La guerra se originará por una rebelión que estará a favor de la supremacía divina sobre todos los habitantes de la tierra. Pero no todos los dioses estarán de acuerdo y se dividirán en dos bandos. Los jotuns, liderados por Loki, estarán a favor de la sublevación del ser humano,y los Aesir y Vanir, liderados por Odín, se decantarán por ofrecernos el libre albedrío, sin dependencias de deidades y observando constantemente nuestra evolución como civilización. Este destino apocalíptico es conocido en otras culturas como El Final de los Tiempos, o el Apocalipsis. Se supone que en ese juicio final no sólo los dioses involucrados perecerán, sino que parte del Universo desaparecerá. Odín, conocedor de esa terrible profecía y del desacato que Loki iba a cometer, lo desterró. Aun y así, Loki se escapó de su cárcel en el Asgard y cayó a nuestra dimensión, el Midgard, la tierra, conjurando aquí su propia cárcel invisible y conviviendo con los humanos, creando caos, destrucción y confusión allá por dónde va.



Fue así como llegaron a la tierra los berserkers y los vanirios. Creados por la magia de los dioses Aesir y Vanir, se encargarían de cuidar de los humanos y de alejarnos de Loki (algunos lo conocen como el diablo). Ellos intentarán por todos los medios que el Ragnarök no llegue y que Loki no moleste a los humanos más de lo necesario. El caído, por su parte, hace todo lo posible para desestabilizar el órden que Odín quiere mantener en nuestra dimensión.


La batalla entre el bien y el mal, ya ha empezado. El Ragnarök se acerca. Y tú.... ¿de parte de quién estás?


Fuente: Saga Vanir Web oficial

No hay comentarios:

Publicar un comentario

En Saga Vanir FanClub no se toleran agresiones verbales contra otros miembros o visitantes de la pagina, no se toleran los comentarios sobre piratería de ningún tipo de libro (Descargas i/o envío por correo electrónico de libros ilegales) ni se admiten agresiones sobre la propiedad intelectual de la autora.